29 de enero de 2009

Mendigo kilómetros

Por un instante pensé que había bebido demasiado, que llevaba muchas horas sin comer y que el alcohol y el hambre me estaban desconectando de la realidad. Pero luego pensé que no era para tanto. Precisamente una de las premisas para escribir poesía preconizadas por el realismo visceral, si mal no recuerdo (aunque la verdad es que no pondría la mano en el fuego), era la desconexión transitoria con cierto tipo de realidad.

(Bolaño)



¿Sería demasiado arriesgado sustituir los apuntes por el tequila?

[-3]

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Qué grande es.

¿Bebemos mezcal?

Carmen G. de la Cueva dijo...

Sí, por favor. Sácame con cualquier excusa de estas cuatro paredes.

Anónimo dijo...

¿Cuándo acabas tus exámenes? ¿Cuándo te vas a México?

(estos son días difíciles para rescatarte)

Carmen G. de la Cueva dijo...

SOS

Acabo mañana y me voy el sábado...

¿nos vemos en el DF?

Anónimo dijo...

Seguro.

Anónimo dijo...

Pero a mí no me ves en el DF???? La última conversación hipervinculante, la necesito.

UN abrazo....

Anónimo dijo...

Oooh!! Me ha encantado este detalle... Enlace a Bunbury en tu blog, lo conseguí!! jeje :)

No hace falta que te diga otra vez lo mucho que te voy a echar de menos y lo difícil que va a ser ir cada mañana a esa clasesita de repelentes a sabiendas de que tú ya no vas a estar en el asiento de al lado subiendome la moral...
Mi psicologa personal... Qué vacía se queda Sevilla hoy :(

Mucha suerte en tu aventura, prometo pasarme por aquí cada día y escribirte emails kilométricos con frecuencia.
Tú simplemente disfruta y bebe mucho tequila a mi salud, jeje. Te quiere mucho

Lady Blue

Carmen G. de la Cueva dijo...

Ay mi Anita! Yo también te echaré de menos...ya sabes que no me necesitas, eh? Qué prefieres? Tequila o mexicano? Lo que pese menos...

Un besazo!